Las principales diferencias entre los vinagres balsámicos y de manzana radican en sus sabores, colores y texturas. A su vez, estas diferencias llevan a los chefs a usar los dos tipos de vinagre de manera diferente.
Ambos tipos de vinagre son agrios o ligeramente ácidos, pero el vinagre balsámico tiende a ser ligeramente más dulce. Esto se debe al mayor contenido de carbohidratos que se encuentra en el vinagre balsámico. El vinagre de sidra de manzana contiene menos carbohidratos que el vinagre balsámico, lo que le da un sabor más agrio, algo áspero.
El vinagre de manzana tiende a ser de color paja debido al color natural del jugo de manzana. En contraste, el vinagre balsámico obtiene su tono oscuro característico desde el primer paso del proceso, que es la reducción del jugo de uva prensado. El vinagre se vuelve aún más oscuro a medida que envejece en barriles de madera. El proceso de envejecimiento también le da al vinagre balsámico un cierto grado de grosor y textura.
Debido a estas diferencias, el vinagre balsámico y el vinagre de manzana tienen diferentes usos culinarios. El vinagre balsámico mejora el sabor de la carne ysss el pescado. También es un componente de ciertos aderezos para ensaladas, y fruta fresca como duraznos y fresas. El vinagre de manzana es ideal para adobos y es un ingrediente en varios conservantes de alimentos, encurtidos y salsas picantes.