El escorbuto era muy común en los marineros durante los siglos 17 y 18 ya que solían pasar mucho tiempo en barcos sin consumir frutas y verduras. Por esta razón, la enfermedad también se conocía como «la plaga del mar».
Hoy en día el escorbuto se considera una enfermedad rara, que afecta principalmente a niños pequeños o recién nacidos.
Los síntomas del escorbuto son sangrado e inflamación con hinchazón o pus en las encías, que puede desencadenar en la pérdida de dientes, dolor en las articulaciones, pérdida de cabello, anemia, heridas deficientes y debilidad.