En informática, una base de datos es una colección de datos que se crea para almacenar, acceder y recuperar datos. Los objetos como tablas, consultas e informes, entre otros, comprenden la base de datos. El acceso a los datos normalmente es proporcionado por un «sistema de gestión de bases de datos», diseñado para la interacción de los usuarios con las bases de datos.
Un almacén de datos está diseñado para analizar, informar, integrar datos de transacciones de varias fuentes y hacer un uso analítico de ellos. Los informes recuperados de los almacenes de datos pueden ir desde comparaciones y tendencias anuales y trimestrales hasta gráficos diarios detallados.
Una base de datos está diseñada principalmente para registrar datos. Un almacén de datos, por otro lado, está diseñado principalmente para analizar datos. Una base de datos normalmente está optimizada para realizar operaciones de lectura-escritura de transacciones de un solo punto. No está diseñado para realizar grandes consultas analíticas como en un almacén de datos.
Una de las diferencias prácticas entre una base de datos y un almacén de datos es que el primero es un proveedor de datos en tiempo real, mientras que el segundo es más una fuente de análisis de datos a medida que se registran. Cualquier información puede recuperarse de un almacén de datos para su análisis en cualquier momento que sea necesario.
Una base de datos generalmente presenta tablas complejas porque los datos están organizados de modo que ningún elemento se duplica. Esta estructura organizativa proporciona un procesamiento y almacenamiento de datos muy eficiente. Un almacén de datos, por otro lado, está diseñado para mejorar las consultas analíticas, lo que se logra utilizando menos tablas y una estructura más simple.