La biosfera es la capa de la Tierra donde se produce la vida, es donde habitan los seres vivos. El planeta Tierra es el único en el que hay vida y esto se debe a la luz, al calor del sol, al agua en forma líquida y al aire. Estos son los elementos esenciales para sobrevivir.
La tierra se puede dividir en cuatro partes:
- Litosfera: es la parte sólida, está formada por una gran variedad de rocas.
- Hidrosfera: es la parte del planeta formada por lagos, ríos, mares, océanos y mantos freáticos.
- Atmósfera: es la capa de aire que rodea el planeta, formada por gases (nitrógeno, oxígeno, dióxido de carbono, gases nobles y vapor de agua).
- Biosfera: son las regiones habitadas del planeta.
La biosfera está formada por todos los ecosistemas de la Tierra. Estos ecosistemas están formados por factores bióticos (plantas, animales, microorganismos) y abióticos (agua, luz, suelo, viento).
Todos los ecosistemas que están presentes desde las montañas más altas hasta las profundidades de los mares son parte de la biosfera. En estos lugares las condiciones ambientales varían, es por eso que el ecosistema se divide en dos tipos: el ecosistema terrestre y el acuático.
Los seres vivos se distribuyen a través de los ecosistemas según el clima y se adaptan al medio ambiente para sobrevivir.
Pocos animales sobreviven a las regiones más extremas de la biosfera, los ambientes más favorables se encuentran en medio de los dos extremos. En las profundidades de los mares, por ejemplo, los únicos seres sobrevivientes son aquellos que están adaptados a la gran presión que el agua ejerce sobre ellos y a la falta de luz. En cambio, en las montañas más altas, sobreviven aquellos seres que están adaptados a las bajas temperaturas y al aire.