Los gatos machos son más extrovertidos que sus contrapartes hembras. Caminan más, están inquietos, rocían orina y son aún más agresivos con otros gatos e incluso con las personas. Marcan sus territorios como cualquier otro gato macho. Sin embargo, su territorio reclamado es a menudo 10 veces más grande que el de las gatas. Lo hacen rociando orina, defecando o incluso con secreciones de las glándulas faciales.
Los gatos machos castrados, por otro lado, se dice que actúan de manera un poco diferente. Según los estudios, los gatos machos castrados viven el doble. También se les considera generalmente más amigables, más cariñosos, más apegados a sus dueños, y tienden a deambular menos. Sin embargo, estas características no son 100% precisas, ya que los comportamientos y las personalidades también se ven afectados por el entorno.
Un gato macho generalmente pesa alrededor de 4,5 a 5,5 kg. Sin embargo, un gato salvaje macho tiende a pesar menos, alrededor de 4 kg, ya que tienen un acceso limitado a los alimentos. Su altura puede ser de 20 a 25 cm, y hasta 46 cm de longitud.
Se dice que las gatas son más relajadas. Cuando están en celo, son expresivas a través de la vocalización excesiva y buscan atención. Pueden ser muy protectoras y agresivas cuando tienen gatitos. A diferencia de los gatos machos, las gatas entran en celo alrededor de los seis meses de edad y esto se repetirá aproximadamente cada dos semanas, con una duración de aproximadamente 4 a 7 días. A menudo intentarán escapar o deambular buscando un compañero durante este tiempo.
Las gatas esterilizadas, por otro lado, se dice que son más independientes, pero aún así se mantendrán más cerca de casa. Al igual que con los gatos machos, también son menos agresivas y más cariñosas. Según los estudios, las gatas esterilizadas viven un 62% más de tiempo.
Una gata promedio generalmente pesa alrededor de 2,7 a 4,5 kg. Miden entre 20 a 25 cm de altura y hasta 46 cm de longitud.
Algunas personas dicen que se pueden ver diferencias cuando los gatos son castrados o esterilizados. Eso puede ser cierto, pero teniendo en cuenta que los comportamientos distintos de los gatos provienen de su deseo sexual, verá la mayoría de las diferencias cuando los gatos no estén castrados/esterilizados.
Para resumir, los gatos machos y las gatas difieren principalmente en su tamaño. Obviamente, los gatos machos son los más grandes y las gatas las más pequeñas. Sus comportamientos y personalidades también difieren, pero hay otros factores a considerar. Sin embargo, una diferencia clara, independientemente de estos factores, es que los gatos machos son más territoriales y las gatas entran en celo.