El dióxido de carbono, también conocido como anhídrido de carbono, es un gas inorgánico formado como producto de la respiración de las plantas y los animales.

El dióxido de carbono se encuentra principalmente en la naturaleza. Es el producto del proceso de respiración. Todas las formas de vida necesitan respiración para sobrevivir, en este proceso los organismos inhalan o capturan oxígeno del medio ambiente y a través de diferentes reacciones bioquímicas se produce CO2 y agua. El dióxido de carbono se encuentra en la atmósfera y también es emitido por volcanes, gas natural, petróleo crudo y aguas termales.

El dióxido de carbono se utiliza en la producción de otros productos más valiosos en la industria química. Algunos de estos productos son la urea, utilizada como fertilizante y el disolvente y precursor químico metanol. Otros productos son las sales de carbonato como el carbonato de sodio y el bicarbonato (bicarbonato de sodio). Se utiliza como aditivo alimentario y también como propulsor. Está presente en refrescos, en agua de soda y en el hielo seco.

La inhalación de dióxido de carbono puede causar dolor de cabeza y aumentar la frecuencia respiratoria. Puede causar inconsciencia a altas concentraciones. El hielo seco puede causar quemaduras frías. No es inflamable.