El cercopiteco mona pertenece al grupo de los monos del Viejo Mundo. Se puede encontrar en el suroeste de África. Habita en selvas tropicales, bosques y manglares.
El cercopiteco mona puede alcanzar de 30 a 50 cm de largo y de 2 a 6 kg de peso. Los machos son más grandes que las hembras.
Tiene la espalda de color marrón rojizo o marrón-agutí, rabadilla blanca y partes ventrales del cuerpo y cola y patas negras. La cara gris azulada está cubierta de cejas oscuras y una franja blanca en la frente.
Pasa toda su vida en los árboles (animal arbóreo). Se mueve rápida y hábilmente a través de las copas de los árboles. El cercopiteco mona aterriza en las cuatro extremidades cuando salta de un árbol a otro. Ocasionalmente cae al suelo o al agua, pero la mayoría de estas caídas terminan sin lesiones.
Está activo por la mañana y por la tarde (animal diurno).
El cercopiteco mona es un animal omnívoro. Su dieta se basa en frutos, brotes, hojas y diversos tipos de insectos y otros invertebrados.
Tiene bolsas en las mejillas bien desarrolladas (son casi del mismo tamaño que el estómago) que se utilizan para almacenar alimentos. Sus dientes están cubiertos con cúspides diseñadas para moler alimentos.
Vive en grupos de 5 a 50 individuos. Cada grupo consta de un macho adulto y numerosas hembras con su descendencia.
El cercopiteco mona es un animal territorial. Un grupo ocupa un territorio de 20 hectáreas.
Los machos detectan a las hembras receptivas a través del sentido del olfato. A diferencia de muchas otras especies de monos, no muestran signos de hinchazón del estro (hinchazón y enrojecimiento de los genitales que indican que las hembras son receptivas).
Las hembras producen descendencia una vez cada dos años. El embarazo dura de 5 a 6 meses y termina con una cría. Nacen en los árboles durante la noche. Dependen de la leche materna durante el primer año de vida.
Alcanzan la madurez sexual a la edad de 2 a 5 años.
El cercopiteco mona puede sobrevivir hasta 22 años en cautiverio y alrededor de 30 años en la naturaleza.