Al igual que otras muchas especies de lagartijas, el lagarto ágil es un animal carnívoro, lo que significa que tiene que cazar y comer otros animales para sobrevivir. Estas lagartijas se alimentan principalmente de una gran variedad de invertebrados, incluidos insectos, saltamontes y arañas.

El pequeño tamaño de la lagartija, junto con su naturaleza lenta, hace de estos animales un objetivo primordial para los hambrientos depredadores. Las aves, los perros y los gatos son los depredadores más comunes del lagarto ágil, junto con la destrucción del hábitat causada por los humanos.