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Begur es un municipio del Baix Empordà, situado en el macizo de Begur.
Por todo el lado del levante y al noroeste limita con el mar, en un tramo de litoral alto y escarpado; al norte limita con el municipio de Pals, al oeste en parte con Regencós y al sur con Palafrugell. Se encuentra en el centro de la franja litoral de la comarca y comprende casi todo el sector montañoso del macizo de Begur, extremo septentrional de la Cordillera Litoral. El macizo está formado por calizas, rocas metamórficas y granitos.
El territorio es, pues, accidentado, con valles estrechos y fuerte pendiente hacia la costa, donde se abren al mar las pequeñas calas del término.
La villa de Begur, cabeza de municipio, se encuentra a un lado del monte donde se alza el castillo medieval, en un lugar escondido del mar (por razones defensivas), equidistante de los núcleos de la costa, antes de pescadores y después turísticos, los más importantes de los cuales son Aiguablava, Fornells, sa Tuna, Aiguafreda y sa Riera. En las estribaciones meridionales del macizo, en su interior, se encuentra el pueblo de Esclanyà, cerca de Palafrugell. Una carretera local lleva desde la villa de Begur a Regencós, donde enlaza con la carretera principal de Palafrugell a Torroella de Montgrí, y otra de Begur a Palafrugell, pasando por Esclanyà.
El carácter accidentado del territorio no ha favorecido la actividad agrícola, que se localiza principalmente en el sector meridional, el más llano, y en unas pocas masías dispersas por el resto del territorio. Los cultivos, de secano, son sobre todo cereales, forraje y algunos árboles frutales.
El sector comercial está bien representado por tiendas de alimentación, vestuario y equipamientos del hogar, y en cuanto al turismo hay varios establecimientos hoteleros, alquileres de pisos, casas y apartamentos en airbnb y restauración.
La villa de Begur se encuentra a 200 metros de altitud, al pie de la colina con los restos del castillo, y que la esconde desde la costa. El nombre de Begur está documentado a partir de la primera mitad del siglo XI, y se considera de raíz prerromana.
El antiguo poblado de origen prerromano situado en la colina del castillo se desplazó a un lugar más bajo, en una posición típica de una población medieval, como medida preventiva contra la piratería. Las casas se agrupan en calles estrechas y sinuosas, de urbanismo poco estructurado y adaptado a la irregularidad del terreno, rodeando la iglesia.