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El sector meridional, ya sobre el Ter, se inicia con el característico Pont Nou, cuya silueta es uno de los símbolos de la villa; tiene un gran arco sobre el río y otro pequeño que da paso a la calle de Sant Roc. Este puente, de doble pendiente, constituía un acceso a la villa amurallada por la llamada Puerta de Cerdanya. Su construcción se atribuye al siglo XIV. Este sector corresponde a la Vila de Baix, formada en época medieval y rodeada de murallas, de las que hay restos. Hay una plaza con la antigua iglesia gótica del convento, erigida a partir de 1352, la antigua Casa Ribes, un casal gótico muy deteriorado pero todavía imponente, y la casa de la villa, casal de piedra también de líneas góticas, con un escudo sobre la fachada (el interior es totalmente renovado). Domina este sector el monte de les Reliquies, donde estuvo el castillo (1196-1698) y la iglesia de San Nicolás, en la que se estableció un hospicio u hospital, regido por canónigas augustinianas, hasta 1581; la iglesia desapareció también en 1698, cuando fue volada junto al castillo por las fuerzas del duque de Vilafermosa.
Un puente une el núcleo medieval con los sectores más antiguo y más moderno; éste, hacia la carretera que va a Llanars, pasando por el sector de expansión, se formó por la función de lugar de residencia, vacacional y turístico que adquirió la villa desde finales del siglo XIX. El paseo de Maristany proyectado e iniciado a finales del primer cuarto del siglo XX, centra este sector, adornado con notables torres y chalés y bien urbanizado y ajardinado. Entre las residencias más destacadas se encuentra la posesión llamada Vora el Ter, con una pequeña iglesia y un claustro trasladados desde San Esteban de Gormaz (Soria), donde se adosaron nuevas edificaciones que alojaron otras piezas de museo.
La iglesia del monasterio de Sant Pere de Camprodon fue edificada en el antiguo valle de Llandrius, en torno al 904, año que fue consagrada por el obispo Servusdei de Girona; desde el principio recibió el nombre de Camp-rodó, que probablemente era el del predio donde se erigió el templo. Fue consagrada como parroquia de las villas o masías de Taulat, Puigfrancor, Magrià, Freixenet, Porreres, Segurioles, Creixenturri y Paradella (algunas de las cuales subsisten como masías, y otras más tarde parroquias independientes).