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En el corazón de la Garrotxa encontrará Santa Pau, un pueblo medieval situado en un entorno idílico como es el Parque Natural de la Zona Volcánica de la Garrotxa. Como en el caso de Besalú, sus callejuelas que datan del siglo XIII, te transportarán miles de años atrás y podrá dejarse llevar por siglos de historia explorando cada uno de sus rincones. Descubre el encantador pueblo de Santa Pau con tus propios ojos.
El antiguo convento de Sant Domènec en Puigcerdà fue fundado en 1291 por el fraile Bernat Guillem. Recibió la protección del rey Jaime II de Mallorca y esto permitió la construcción del conjunto conventual, que se prolongó hasta el año 1310, y que constaba del convento, el claustro y la iglesia, junto con otras dependencias: cementerio, huertos, etc.
Actualmente se puede contemplar una de las alas del claustro, obra de 1603, con columnas de piedra de una sola pieza, financiado por Joan de Queralt, gobernador de Cataluña. Las demás alas fueron destruidas por las fuerzas napoleónicas. El convento fue desafectado en 1835 y se utilizó de cuartel y posteriormente de escuela. Calixt Freixa lo rehabilitó entre 1893/1895 como prisión y, más recientemente, en 1978, Josep M. Ribot. Después de una nueva restauración integral a cargo de Josep M. Guillumet, a mediados de los ochenta del siglo XX, es la sede de la Biblioteca Condado de Cerdanya, el Archivo Comarcal de la Cerdanya, el Instituto de Estudios Ceretanos y las Juventudes Musicales de Cerdanya. En el interior, se conserva la entrada a un refugio de la guerra civil y desde el propio edificio, se inicia un túnel que va hacia el casco antiguo.
Muy cerca de Camprodon, encontraráz Beget un pueblecito con mucho encanto que seguro te va a enamorar. Paseando por sus calles despedregadas, tendrás la sensación de que el tiempo se ha detenido, y no es extraño, porque el pueblo sigue manteniendo la estructura que tenía en el siglo XII. Aunque la mayoría de las casas han sido restauradas, verás que la escénica medieval de esta ciudad todavía está viva por todas y cada una de sus calles. Recomendamos hacer una visita a la Iglesia de San Cristóbal y cruzar los tres puentes que unen sus barrios.