Antigua colonia romana llamada Barium, fue ocupada por los sarracenos en el año 840, y volvió a poder de los bizantinos en 875.
Fue conquistada por los normandos bajo Robert Guiscard (1071). Durante la edad media se convirtió en uno de los principales puertos de embarque de los croatas hacia Oriente.
A partir del siglo XV fue dominada sucesivamente por diversos poderes extranjeros: la corona catalanoaragonesa, los franceses y los austríacos.
En el siglo XVIII la ciudad se rehizo de la decadencia sufrida; después, con la unificación de Italia, se convirtió en uno de los principales centros comerciales del país.
En la ciudad antigua sobresalen la basílica de San Nicolás (siglos XI-XII), que conserva, desde 1087, las reliquias de San Nicolás, la Catedral de Bari (siglo XII) y el castillo de Bari (siglos XIII-XIV). La nueva ciudad (1813) es una urbanización cuadriculada.