Las víboras tienen dientes muy particularmente adaptados a su forma de vida y a su alimentación. A continuación te detallo algunas de sus principales características:
- Número de dientes: Las víboras tienen un gran número de dientes, que pueden variar desde unos pocos hasta más de 100. Estos dientes se distribuyen a lo largo de la mandíbula superior e inferior y están dispuestos de forma que permiten a la víbora sujetar y morder con fuerza a sus presas.
- Forma de los dientes: Los dientes de las víboras tienen una forma muy particular, que se asemeja a la de una aguja. Están diseñados para penetrar en la piel de las presas y liberar veneno directamente en el torrente sanguíneo.
- Disposición de los dientes: Las víboras tienen dos hileras de dientes, una en la mandíbula superior y otra en la mandíbula inferior. Los dientes de la mandíbula inferior están dispuestos de forma que pueden levantarse y permitir que los dientes de la mandíbula superior se inserten en la piel de la presa.
- Función de los dientes: Los dientes de las víboras tienen una función muy importante en su forma de alimentación. Gracias a ellos, las víboras pueden sujetar y morder a sus presas y liberar su veneno para paralizarlas y facilitar su digestión.