La ropa tradicional de las mujeres en Mesopotamia varía dependiendo de la época y la clase social. Durante la época Sumeria (alrededor del 4500 a.C.), las mujeres de la clase alta se vestían con ropa elaborada hecha de lino o lana tejida a mano. Estas prendas incluían largas túnicas que se sujetaban con cinturones, y a menudo se decoraban con bordados y adornos. También se usaban faldas largas y amplias, y las mujeres solían llevar el cabello recogido en trenzas o rizos.
Durante la época de Asiria (alrededor del 800 a.C.), la ropa de las mujeres se volvió más ajustada y se caracterizó por la decoración con patrones geométricos y figuras animales. Los trajes típicos consistían en una túnica ajustada con mangas largas y una falda larga y ajustada, que se sujetaba con un cinturón. También se usaban joyas y adornos para el cabello, como tiaras y pendientes.
En la época de Babilonia (alrededor del 600 a.C.), la ropa de las mujeres se caracterizaba por la decoración con patrones florales y figuras humanas. Los trajes típicos consistían en una túnica ajustada con mangas largas y una falda larga y ajustada, que se sujetaba con un cinturón. También se usaban joyas y adornos para el cabello, como tiaras y pendientes.
En general, la ropa tradicional de las mujeres en Mesopotamia se caracterizaba por ser elaborada y decorada con patrones y adornos. La ropa también se adaptaba a las necesidades de las mujeres, ya que se usaba para cubrir y proteger el cuerpo.