La mayor parte de Ruanda es una región de pastizales de sabana. Queda poco bosque. El país es uno de los más erosionados y deforestados de toda África tropical. Los bosques que quedan son pequeñas áreas de bosques tropicales a lo largo de la frontera occidental, al norte y al sur del lago Kivu. Los árboles más comunes son el eucalipto, importado del sur en la década de 1890, acacias y palmas aceiteras.

La vida silvestre era abundante antes de que la región se convirtiera en agrícola. Todavía hay elefantes, hipopótamos, búfalos, guepardos, leones, cebras, leopardos, monos, gorilas, chacales, hienas, jabalíes, antílopes, lémures, cocodrilos, gallinas de Guinea, perdices, patos, gansos y codornices. Debido a que la región está densamente poblada, éstas se están reduciendo y algunas especies están desapareciendo. A principios del siglo XXI había al menos 151 especies de mamíferos, 200 especies de aves y más de 2200 especies de plantas en todo el país.