Un polígono se puede definir como una figura de plano cerrado (una forma bidimensional) que consta de tres o más segmentos de línea. Los polígonos se pueden dividir en muchos tipos, uno de estos tipos se basa en los ángulos internos. Un polígono convexo es aquel en el que ninguno de los ángulos apunta hacia adentro. En otras palabras, no tiene un ángulo interno mayor a 180 grados.
Un polígono con cualquiera de los ángulos internos mayor a 180 grados se conoce como un polígono cóncavo.
Es importante tener en cuenta que todas las diagonales de un polígono convexo se encuentran completamente dentro del polígono. Sin embargo, en un polígono cóncavo, algunas diagonales siempre estarán fuera del polígono. Todos los polígonos regulares son convexos (un polígono que tiene todos los lados iguales y todos los ángulos interiores iguales).
Los polígonos convexos son más fáciles de dibujar en comparación con los polígonos cóncavos.