La plasmólisis y la deplasmolisis son dos procesos importantes para el balance hídrico de las plantas.
La plasmólisis se produce cuando la célula vegetal se coloca en una solución hipertónica.
La desplasmolisis se produce cuando una célula vegetal se coloca en una solución hipotónica.
La plasmólisis se produce por exosmosis, mientras que la desplasmolisis se produce por endosmosis.
El protoplasma se contrae durante la plasmólisis, en cambio en la deplasmolisis el protoplasma se hincha.
La plasmólisis hace que las plantas se marchiten, mientras que la deplasmolisis restaura la turgencia de las plantas.