Tanto la encefalopatía de Wernicke como el síndrome de Korsakoff son causados por la deficiencia de tiamina y por el alcoholismo.
La encefalopatía de Wernicke es un trastorno neurológico caracterizado por un conjunto de síntomas psicóticos agudos y oftalmoplejía.
El síndrome de Korsakoff se caracteriza por confabulación y alteraciones de la memoria a corto plazo.
En la encefalopatía de Wernicke se pueden observar áreas de necrosis y micro hemorragias.
En el síndrome de Korsakoff, además de las áreas de necrosis y hemorragia, hay espacios quísticos con macrófagos cargados de hemosiderina.
La principal diferencia entre la encefalopatía de Wernicke y el síndrome de Korsakoff es que la encefalopatía de Wernicke es reversible con suplementos de tiamina, mientras que el síndrome de Korsakoff es irreversible.
Tanto la encefalopatía de Wernicke como el síndrome de Korsakoff pueden prevenirse fácilmente reduciendo el consumo de alcohol.
Los médicos nunca han considerado que el alcohol sea algo bueno y estos dos trastornos son ejemplos horribles por los que se debe desalentar el consumo excesivo de alcohol.