Los investigadores realizan sus experimentos en diferentes modelos experimentales. Los modelos experimentales pueden ser de dos tipos: in vitro e in vivo.
La investigación in vitro se realiza en entornos artificiales controlados, mientras que la investigación in vivo se realiza dentro de los sistemas vivos en condiciones celulares naturales.
El experimento in vitro es menos costoso que el experimento in vivo.
El experimento in vitro proporciona resultados más rápidos que el experimento in vivo.
Los experimentos in vivo son más precisos que los in vitro.
Ejemplos de in vivo: uso de organismos modelo como ratones, cerdos, conejos, simios, etc.
Ejemplos de in vitro: experimentos de cultivo celular en placas de Petri, experimentos en tubos de ensayo, etc.