Congelar nueces es excepcionalmente fácil, y con unos pocos pasos puede congelar sus nueces para mantenerlas frescas para usar más adelante y evitar que se echen a perder antes de usarlas.
Para las nueces que sobran de un paquete abierto, lo mejor sería colocarlas en un recipiente congelable. Puede optar por usar un recipiente de plástico para congelador que tenga la capacidad de sellar herméticamente o una bolsa hermética para congelador.
Ambas opciones funcionan bien para mantener el aire y la humedad bloqueados, preservando aún más las nueces almacenadas dentro. Recuerde etiquetar el contenedor de almacenamiento con la fecha de congelación antes de colocarlo en el congelador, para que tenga una indicación de cuándo consumirlas.
Es mejor no congelar nueces molidas. Si está planeando usar nueces molidas, en lugar de eso, congélelas enteras y luego tritúrelas una vez que las haya sacado del congelador.
Las nueces son famosas por recoger y absorber los olores de los alimentos almacenados cerca de ellas. Debido a esto, es muy importante asegurarse de que el contenedor de almacenamiento que haya elegido lo proteja de la absorción de otros sabores en el congelador.
Si desea congelar un paquete de nueces, pero solo quiere consumirlas en porciones, es una buena idea congelarlas de una manera que sean fáciles de separar en una etapa posterior.
Para hacer esto, debes colocar las nueces en una bandeja. Colóquela en el congelador hasta que esté completamente congelado. Luego transfiera estas nueces congeladas a un recipiente hermético o bolsa de almacenamiento.
De esta manera, las nueces no se congelarán juntas, y será fácil tomar un puñado del empaque, en lugar de descongelarlas todas.
Las nueces se ponen rancias fácilmente cuando se exponen a temperaturas cálidas. Esto se debe a su alto contenido de aceite, que las hace echarse a perder rápidamente si se dejan a temperatura ambiente durante un cierto período de tiempo.
Las nueces si se almacenan correctamente en un recipiente hermético, una bolsa de plástico para congelar, o en su embalaje original sin abrir, pueden permanecer frescas en el congelador hasta por 1 año.