La mejor manera de recalentar los churros en casa (¡si por alguna razón no pudiste terminarlos todos de una vez!) es, sin duda, en el horno.
Recalentar los churros en el horno los mantendrá lo más crujientes posible.
Para recalentar los churros en el horno, precaliéntalos a 190 grados. Extienda sus churros en una bandeja para hornear y revuélvalos durante 5-8 minutos hasta que estén completamente calientes.
Si no tienes un horno convencional también puedes usar un horno tostador, hará el trabajo casi tan bien como uno normal.
Otra opción posible es recalentarlos en una freidora. Debido a que las freidoras de aire usan calor seco, no harán que sus churros se empapen.
Recalentar churros en la estufa (cocina de gas) no es la opción ideal, simplemente calienta una sartén a fuego medio y, una vez que esté caliente, coloca los churros durante 5-8 minutos.
Quizás la forma más rápida de recalentar churros es en el microondas. Solo se necesitas colocarlos durante unos 10-15 segundos como máximo.
Aunque los churros son alimentos fritos, freírlos es probablemente la peor forma de recalentarlos.