Dinamarca tiene un clima templado, gran parte condicionado por los vientos generalmente del oeste y por el hecho de que el país está prácticamente rodeado por agua. Hay poca fluctuación entre las temperaturas diurnas y nocturnas, pero los cambios repentinos en la dirección del viento causan considerables cambios de temperatura. La temperatura media en febrero, el mes más frío, es de 0 grados, y en julio, la más cálida, de 17 grados. La lluvia cae de manera bastante uniforme a lo largo del año, con un promedio anual de aproximadamente 61 cm.