Tener un patio grande con una cerca se considera la situación de vida ideal para este tipo de perro.

Los perros Akita son fuertes y, por lo general, pueden manejar fácilmente el trineo y las actividades de extracción de peso. A los perros Akita les encanta saltar, correr y jugar.

Un Akita es un perro ideal para caminatas y son lo suficientemente grandes y resistentes para manejar incluso en terrenos difíciles y desafiantes.

También están muy dispuestos a jugar con los niños a correr y explorar todo el día. Un Akita bien entrenado y en forma es tranquilo y dócil en la casa y, por lo general, no se involucra en ningún tipo de comportamiento destructivo.

A los Akitas, como a cualquier otro perro, les gusta tener variedad de opciones para hacer ejercicio y no solo completar la misma rutina diaria. Son excelentes nadadores, a veces tienen que ser atraídos al agua las primeras veces, pero pronto disfrutan de un refrescante baño.

El Akita es dócil, inteligente, valiente, audaz, espontáneo y muy cariñoso con su familia.

El Akita es una mascota protectora, eso lo convierte en un gran perro guardián.