El suelo calcáreo y un clima relativamente suave permiten una rica flora y fauna en el oeste de Estonia. Las plantas nativas suman más de 1600 especies. La abundancia de bosques y especies de plantas proporciona un hábitat adecuado para alces, ciervos, jabalíes, lobos, linces, osos y nutrias. A principios del siglo XXI había al menos 65 especies de mamíferos y 205 especies de aves.