El planeta está compuesto de cuatro capas, que son: corteza, manto, núcleo externo y núcleo interno.
La corteza: está formada por rocas areniscas, granitos, basaltos y mármoles. Tiene entre seis y 75 kilómetros de espesor. Es importante destacar que la corteza debajo de los océanos es menos gruesa que debajo de los continentes.
El manto: está debajo de la corteza y se encuentra a 2.891 kilómetros de profundidad. Está formado por rocas de consistencia viscosa y tiene una temperatura de 600 ºC (debajo de la corteza) a 3.500ºC (en el límite con el núcleo).
Núcleo externo: se encuentra de 2.891 a 5.150 kilómetros de profundidad, está formado por la aleación de hierro y níquel más un elemento ligero, como azufre o potasio, en forma líquida. La temperatura oscila entre 3.500 ºC y 4.600ºC.
Núcleo interno: se encuentra entre 5.150 y 6.371 kilómetros de profundidad. Forma una bola de metal sólido compuesta de hierro y níquel. La temperatura alcanza los 4.900ºC.