Los habitantes indígenas de Luxemburgo se consideran una nacionalidad distinta, con un carácter étnico específico. Una fuerte indicación de ese carácter es el lema nacional, «Mir woelle bleiwe wat mir sin» («Queremos seguir siendo lo que somos»), ya que a pesar de una larga historia de dominación extranjera, los luxemburgueses han conservado su individualidad como nación. También hay residentes nativos de ascendencia celta, francesa, belga o alemana, así como una importante población inmigrante de portugueses, italianos y otros europeos residentes.