Si es tu primera vez corriendo, te recomiendo comenzar con sesiones de entrenamiento cortas y aumentar gradualmente la duración y la intensidad a medida que tu cuerpo se vaya adaptando. Una buena regla general es comenzar con sesiones de 20 a 30 minutos y aumentar la duración en unos 5 minutos cada semana.
Además de aumentar la duración, también es importante tener en cuenta la intensidad de tus entrenamientos. Es importante comenzar con un ritmo ligero y cómodo, para que tu cuerpo pueda adaptarse al ejercicio. Una vez que hayas estado corriendo durante varias semanas, puedes comenzar a aumentar la intensidad al incorporar sprints cortos o aumentando la pendiente de las cuestas.
En general, es importante escuchar a tu cuerpo y no sobre esforzarte. Si sientes dolor o molestias, detente y descansa. Es importante también hacer calentamiento y estiramiento antes y después de cada sesión de entrenamiento. Si tienes alguna duda específica o preocupación, te recomendaria consultar a un profesional de la salud o entrenador personal.