El Okunoshima es una isla muy pequeña situada en el Mar Interior de Japón, ciudad de Takehara, Prefectura de Hiroshima. También se conoce como la Isla Conejo o Conejito debido a la gran población de conejos salvajes que habitan en ella.
Aunque hay muchas teorías sobre la existencia de conejitos en la isla, la mayoría de las personas afirman que fueron liberados después del final de la Segunda Guerra Mundial. Durante la guerra, los conejos habían sido capturados y traídos a la isla como sujetos de prueba para las armas químicas. Sin embargo, los expertos creen que después del final de la Segunda Guerra Mundial, todo lo relacionado con la planta química, incluidos los conejos, fueron asesinados durante la demolición y la quema de la planta. Pero existe la teoria de que los trabajadores que habían sido afectados durante la fabricación de los productos químicos liberaron a los conejos en cautiverio.
La población de conejos atrae cada año a 300.000 turistas, es por eso que El Ministerio de Medio Ambiente de Japón está preocupado por el futuro de estos animales en la isla ya que según ellos, los turistas impiden que los conejos disfruten de su vida en la naturaleza. Se están realizando esfuerzos para disuadir la excesiva intervención artificial y mejorar la convivencia de los conejos salvajes con los turistas.