En un adulto, el intestino delgado mide alrededor de 5 metros (en promedio) y tiene entre 2,5 y 5 centímetros de diámetro. Si el intestino delgado fuera un simple tubo, tendría una superficie de solo medio metro cuadrado, o del tamaño de una silla. Sin embargo, el intestino delgado tiene un revestimiento interno muy complejo, que se compone de millones de pequeños dedos (llamados vellosidades), que aumentan el área a unos 200 metros cuadrados, ¡o aproximadamente al tamaño de una cancha de tenis!
La comida se puede retener en el intestino delgado de 1 a 4 horas. Durante este tiempo, tiene lugar la mayor parte de la digestión química de los alimentos (y también la mayor parte de la absorción).
Tus intestinos delgado y grueso tienen músculos (llamados músculos lisos) que mueven los alimentos a través de los intestinos. Estos músculos permiten que todos los alimentos que ingieres pasen por tu sistema, a menudo desafiando a la gravedad.
El intestino grueso es en realidad más corto que el intestino delgado, con solo unos 1,5 metros de largo en un adulto. Los intestinos se nombran por lo anchos que son, no por lo largos que son.
¡Durante tu vida, el sistema digestivo (boca, esófago, estómago, intestinos, páncreas, hígado) procesará más de 50 toneladas de alimentos y líquidos!
Los alimentos absorbidos en los intestinos van directamente al hígado a través de una vena grande llamada vena porta.
El intestino grueso forma una «U» invertida en el abdomen. Va desde el lado inferior derecho, hasta las costillas, a través del lado izquierdo y hacia abajo hasta el lado inferior derecho, y eventualmente baja al medio y se conecta con el recto.
El gas que se acumula en el intestino grueso causa flatulencia. La mayoría de estos gases son producidos por bacterias amigables que viven en el intestino grueso y nos permiten absorber diferentes vitaminas y nutrientes que de otra manera no podemos absorber. Este gas suele tardar entre 30 y 45 minutos en pasar por tu sistema.
En el intestino grueso, se absorbe principalmente agua. La comida puede durar en el intestino grueso de 18 horas a 2 días.
La mayoría de las enzimas digestivas del intestino delgado en realidad provienen del páncreas.