La babosa es un molusco que pertenece a la clase Gasterópodo. Hay miles de especies de babosas que se pueden encontrar en todo el mundo. Están adaptadas a la vida en la tierra y en el mar.
Las babosas pueden alcanzar de 1 cm a 26 cm de largo, según la especie.
Las babosas pueden ser de color amarillo blanquecino, gris, marrón o negro. El cuerpo a menudo está cubierto con varias marcas oscuras.
Las babosas no tienen dientes. En cambio, tienen un órgano llamado rádula compuesto por miles de protuberancias en miniatura que facilitan la trituración de los alimentos.
Tienen dos pares de tentáculos retráctiles en la parte superior de la cabeza (se pueden acortar). Las manchas oculares sensibles a la luz se encuentran en la parte superior de los largos tentáculos. El sentido del tacto y el olfato se encuentran en los tentáculos cortos. Cada tentáculo perdido se puede regenerar.
Es capaz de aplanar verticalmente su cuerpo y alargarlo 20 veces, cuando necesita entrar en pequeños agujeros. A diferencia de los caracoles, las babosas no tienen caparazón. Las babosas pueden moverse con seguridad a través de rocas y otros objetos afilados, incluida la hoja de una navaja.
Tiene un solo pulmón. Está conectado con la atmósfera por una pequeña abertura en el lado derecho del cuerpo. Además de los pulmones, las babosas pueden respirar a través de la piel.
La babosa pasa la mayor parte del tiempo en los túneles subterráneos frescos y húmedos. Emerge de noche para alimentarse de hojas, brotes de semillas, raíces y vegetación en descomposición. Algunas especies de babosas son carnívoras. Se alimentan de otras babosas y lombrices de tierra.
La babosa evita el clima cálido porque pierde fácilmente el agua corporal. Es un animal mayormente activo durante la primavera y el otoño.
Las babosas contienen órganos reproductores masculinos y femeninos (son hermafroditas). Aunque pueden producir descendencia por sí mismos, prefieren buscar pareja e intercambiar paquetes de esperma.
La babosa pone de 20 a 100 huevos en la superficie del suelo (generalmente debajo de las hojas) un par de veces al año. Una babosa puede producir hasta 90.000 crías a lo largo de su vida.
El período de incubación depende de las condiciones climáticas. Los huevos a veces eclosionan después de un par de años de latencia.
La babosa puede sobrevivir de 1 a 6 años en la naturaleza. Las hembras viven más que los machos.