La mosca tsetsé es un insecto que pertenece a la familia de las moscas domésticas. Hay 23 especies de moscas tsetsé que se pueden encontrar en el África continental central. Las moscas tsetsé habitan en bosques abiertos.
La mosca tsetsé puede alcanzar de 0,5 a 1,5 cm de largo.
La mosca tsetsé es de color marrón amarillento o marrón oscuro con marcas oscuras en el tórax (pecho).
Se parece a una gran mosca doméstica. Su cuerpo está cubierto de pelos escasos como cerdas. A diferencia de la mosca doméstica, la mosca tsetsé pliega sus alas por completo (un ala metida debajo de la otra ala) cuando está descansando.
El cuerpo de la mosca tsetsé consta de tres partes: cabeza, tórax y abdomen. Tiene una cabeza grande y ojos grandes y muy separados, tres pares de patas y un par de alas. También tiene un par de alas modificadas llamadas halteres que proporcionan equilibrio durante el vuelo.
Tienen un par de antenas en la parte superior de la cabeza. Cada antena está equipada con un apéndice parecido a una cerda llamado arista cubierto de pelos largos y ramificados.
Las moscas tsetsé están activas durante la parte más calurosa del día (animales diurnos).
Se alimentan de la sangre de varios animales. El aparato bucal, llamado probóscide, tiene forma de cuchilla. Se utiliza para penetrar en la piel y facilitar la succión de la sangre.
La mosca tsetsé hembra se aparea solo una vez en la vida, pero es capaz de producir descendencia cada 10 días. Los huevos eclosionan dentro del cuerpo de la hembra. La larva se alimenta del líquido lechoso nutritivo que se secreta de la pared uterina. Cuando la hembra ingiere grandes cantidades de sangre, la larva se desarrolla rápidamente. Cuando las fuentes de alimento son escasas, la larva es pequeña y poco desarrollada.
La larva completamente desarrollada parece un gusano y continúa desarrollándose fuera del cuerpo de la hembra. La larva se entierra en el suelo y se cubre con una capa protectora dura. Un par de semanas después, el insecto adulto emerge del capullo.
Las moscas tsetsé producen 4 generaciones de moscas por año y 31 generaciones a lo largo de su vida.
Las moscas tsetsé adultas pueden sobrevivir de uno a tres meses en la naturaleza.