El oribí es un antílope que pertenece a la familia de los bóvidos. Hay 13 subespecies de oribí que se pueden encontrar en el África subsahariana. El oribí habita en pastizales abiertos y llanuras aluviales.
El oribí puede alcanzar 115 cm de largo y de 15 a 20 kilogramos de peso. Las hembras son un poco más grandes que los machos.
El oribí tiene un pelaje sedoso amarillento o marrón rojizo en la espalda. El mentón, la garganta, el pecho, el vientre y la rabadilla son de color blanco. A diferencia de otros antílopes, el oribí tiene un pelaje blanco en forma de media luna sobre los ojos.
El oribí tiene orejas de forma ovalada, cuello alargado, patas delgadas y cola corta y tupida. Los machos tienen cuernos pequeños y puntiagudos que están anillados en la base.
El oribí está activo temprano en la mañana y al final de la tarde. Descansa durante la parte más calurosa del día.
El oribí es herbívoro. Consume pasto durante la estación húmeda y arbustos y hojas durante la estación seca. El oribí lame las sales de las rocas para obtener todos los minerales que necesita.
El oribí se esconde de los depredadores en la hierba alta. Cuando los depredadores se acercan lo suficiente, el oribí salta repentinamente de su escondite y trata de escapar en una serie de saltos verticales. También produce agudos silbidos cuando está amenazado.
El oribí puede alcanzar una velocidad de 40 a 50 km por hora cuando necesita escapar de los depredadores.
Los depredadores naturales de los oribís son los leopardos, leones, caracales, chacales, perros salvajes, hienas, cocodrilos, pitones y águilas.
El oribí vive una vida solitaria. Ocasionalmente viaja en parejas o en pequeños grupos familiares compuestos por lo general de 6 animales (un macho dominante y pocas hembras con su descendencia). Cada grupo ocupa un territorio de 25 a 100 hectáreas. Los machos usan glándulas cerca de los ojos para marcar sus territorios.
El oribí se aparea durante todo el año (la temporada de apareamiento alcanza su punto máximo durante noviembre y diciembre). La mayoría nacen durante la temporada de lluvias cuando la comida es abundante.
El embarazo en las hembras dura de 200 a 210 días y termina con una cría.
Las hembras alcanzan la madurez sexual a la edad de 10 meses, los machos a la edad de 14 meses.
El oribí puede sobrevivir hasta 14 años en cautiverio.