La civilización griega antigua creía que los olivos podían traer prosperidad y paz, por lo que a menudo esta población los cultivaba.
El olivo es un árbol de hoja perenne que puede alcanzar los 15 metros de altura y puede vivir hasta 500 años. El árbol comienza a producir aceitunas entre los 3 y 4 años de edad, y las aceitunas suelen pesar entre 3 y 4 gramos.
Se cree que las aceitunas tienen un alto contenido de antioxidantes, que no solo ayudan a proteger al cuerpo del cáncer y la pérdida ósea (osteoporosis), sino también a proteger contra las enfermedades cardíacas.
El aceite de aceituna se puede extraer con métodos de prensado en frío para producir aceite de oliva virgen extra. Este es un ingrediente común en muchos de los platos de la dieta mediterránea, considerada una de las más saludables del mundo.
El 90% de las aceitunas cultivadas en la región mediterránea se utilizan para la elaboración de aceite de oliva, que se ha popularizado en todo el mundo.
Hay aproximadamente 59 calorías en 10 aceitunas que pesan 4 gramos cada una.
Las aceitunas contienen aproximadamente un 80% de agua y de un 10 a un 11% de grasa.
La principal grasa de las aceitunas es el ácido oleico, que es un ácido graso monoinsaturado. Este ácido graso se ha relacionado con beneficios para la salud como reducir el riesgo de cáncer, enfermedades cardíacas y disminuir la inflamación en el cuerpo.
Los carbohidratos de las aceitunas son principalmente fibra, lo que representa hasta el 86% de la fibra total en esta pequeña fruta.
Las aceitunas contienen vitamina E, hierro, cobre y calcio.
Muchas aceitunas se envasan en salmuera salada o incluso en agua salada. Esto da como resultado un alto contenido de sodio en la mayoría de las aceitunas.
Las aceitunas contienen muchos antioxidantes que incluyen oleuropeína, hidroxitirosol, tirosol, ácido oleonalico y quercetina. Estos antioxidantes tienen una variedad de beneficios para la salud que incluyen prevenir enfermedades cardíacas y daño hepático, reducir la presión arterial, reducir la inflamación y ayudar a regular las grasas en sangre y el colesterol en el cuerpo.
Se están realizando estudios para determinar si las aceitunas tienen beneficios probióticos. Debido a su alto contenido de fibra, es probable que contribuyan a la salud de las bacterias intestinales.
Se cree que las aceitunas y el aceite de oliva previenen la pérdida ósea. Las tasas de osteoporosis son más bajas en la región mediterránea, lo que puede atribuirse al consumo de aceitunas y aceite de oliva por parte de las personas que viven allí.