Datos y curiosidades sobre la mantis religiosa

Hay diferentes tipos de mantis religiosa. A menudo llevan el nombre de diferentes áreas del mundo (como la Mantis de Carolina, la Mantis europea y la Mantis china), pero se pueden encontrar muchas en todo el mundo.

Estas especies variarán en tamaño. Por ejemplo, la Mantis Carolina (Stagmomantis carolina) crecerá hasta aproximadamente 5 cm de largo, mientras que la mantis religiosa china puede crecer hasta 13 cm de largo.

Datos y curiosidades sobre la mantis religiosa

La mantis religiosa tiene cabeza, tórax y abdomen como todos los insectos. Tiene ojos grandes a cada lado de su cabeza y puede girar su cabeza 360 grados. Esto le permite que vea muy bien. También tiene dos antenas en su cabeza que usa para ubicarse y moverse. Una vez que esté completamente desarrollada, le crecerán alas y podrá volar. Tiene seis patas. Las cuatro patas traseras se usan principalmente para caminar, mientras que las dos patas delanteras tienen espinas afiladas que le ayudan a capturar y aferrarse a las presas.

Las mantis religiosas usan el camuflaje para esconderse de los depredadores y acercarse sigilosamente a las presas. Las diferentes especies varían en color de marrón oscuro a verde. Estos colores les permiten mezclarse con su entorno natural, como la corteza de los árboles o las hojas de las plantas verdes.

La mantis religiosa es un insecto carnívoro. Esto significa que come otros animales, no come plantas. Vive principalmente de otros insectos como moscas y grillos, pero algunas mantis más grandes pueden ocasionalmente capturar y comer un pequeño reptil o ave.

Las mantis religiosas suelen vivir de primavera a otoño. Lo máximo que vivirá es alrededor de 1 año. Una de las cosas más extrañas de este insecto es que la hembra a menudo se comerá al macho y los hermanos a menudo se comerán entre sí.

La mayoría de las especies de Mantis Religiosa no están en peligro de extinción y muchas se tienen como mascotas. También es bueno tenerlas en el jardín, ya que comerán otros insectos.

Los depredadores de las mantis incluyen ranas, roedores, pájaros y murciélagos.

Aunque parezcan lentas, son extremadamente rápidas cuando se mueven para atacar a su presa.

Hay más de 2.000 especies de mantis religiosa. Alrededor de 20 especies viven en América del Norte.

Cuando capturan a sus presas, generalmente muerden su cabeza primero. De esta manera, dejarán de moverse y no podrán escapar.