Agitar y sacudir son dos acciones que implican mover algo de un lado a otro, pero tienen algunas diferencias en el modo en que se llevan a cabo y en el efecto que producen.
Agitar consiste en mover algo de un lado a otro de manera suave y controlada. Por ejemplo, podrías agitar una botella de refresco para mezclar el contenido o agitar un pincel para aplicar pintura de manera uniforme.
Por otro lado, sacudir implica mover algo de un lado a otro de manera brusca y violenta. Por ejemplo, podrías sacudir una manta para eliminar el polvo o sacudir una botella de spray para aplicar el contenido de manera más potente.
En general, agitar se considera una acción más suave y controlada que sacudir. Además, agitar suele tener como objetivo mezclar o mezclar algo de manera uniforme, mientras que sacudir tiende a tener como objetivo eliminar algo o aplicar algo de manera más potente.