La mayor diferencia es que el Halal es la norma dietética para el pueblo islámico, mientras que el Kosher es la norma dietética para el pueblo judío.
El Halal permite el consumo de cualquier animal acuático comestible. Sin embargo, el Kosher prohíbe el consumo de cualquier animal acuático que no tenga escamas y aletas.
El Halal no permite el consumo de alcohol o cualquier alimento que contenga alcohol. Las normas Kosher permiten el consumo de alcohol siempre que esté hecho de ingredientes Kosher.
Tanto el Halal como el Kosher permiten la carne y los lácteos, pero el Kosher prohíbe específicamente combinar ambos.
Comer carne de cerdo está prohibido por ambas leyes. Sin embargo, para que la carne se considere Halal, se debe decir el nombre de Allah antes de sacrificar a cada animal. La sangre no es apta para el consumo según ambas leyes, pero la ley judía prohíbe el consumo del nervio ciático y algunos tipos de grasa animal. Además, la ley judía también exige que el animal muera de una muerte rápida e indolora y que la sangre se drene completamente del cuerpo del animal colgándolo o procesando la carne con sal.