El Boston Terrier se originó en los Estados Unidos. Una raza cruzada del Bulldog y el Terrier Inglés, el Boston Terrier es un perro alto que tiene una estructura notable. Con un peso de 4,5 a 11,5 kg.
En el pasado, el Boston Terrier fue criado para ser un feroz perro de pelea. Además de sus habilidades de lucha, también es de naturaleza cálida y cariñosa, lo que lo convierte en un compañero perfecto para el hogar.
El Bulldog Francés fue criado originalmente en Inglaterra como un bulldog en miniatura. Si bien se han identificado sus orígenes, su linaje sigue siendo un misterio. Su peso oscila entre 7,2 y 12,7 kg.
Como una versión del Bulldog del tamaño de un juguete, el Bulldog Francés es pequeño pero musculoso. Juguetón y divertido, se nutre de la compañía humana.
Aunque es difícil distinguir estas dos razas, existen diferencias significativas en su apariencia, personalidad y salud en general.
El Boston Terrier y el Bulldog Francés parecen provenir del mismo linaje debido a su característica facial. Sin embargo, su construcción y forma están lejos de ser iguales.
En primer lugar, el Boston Terrier es más alto y delgado, mientras que el Bulldog Francés es más robusto y cuadrado en forma y apariencia. Además, el Bulldog Francés es conocido por sus orejas de murciélago.
En términos de color y pelaje, el pelaje liso del Boston Terrier es típicamente blanco y negro.
Ambas razas son de naturaleza cálida y cariñosa. Sin embargo, el Boston Terrier es más activo y juguetón que el Bulldog Francés. El Bulldog Francés disfruta de un estilo de vida sedentario pero al Boston Terrier le encantan las caminatas y otras actividades al aire libre.
Dado que el Bulldog Francés es menos activo, es más propenso a problemas relacionados con el peso. El Boston Terrier, por otro lado, está más en forma y delgado debido a su fuerte deseo de participar en actividades físicas.