La diferencia clave entre la celulosa y el almidón es que la celulosa es un polisacárido estructural que tiene enlaces beta 1,4 entre los monómeros de glucosa, mientras que el almidón es un polisacárido de almacenamiento que tiene enlaces alfa 1,4 entre los monómeros de glucosa.
El almidón y la celulosa son macromoléculas que pertenecen al mismo grupo de carbohidratos. Los carbohidratos son una de las formas comunes de fuentes de energía en los alimentos. Tienen la fórmula molecular CH2O. Varias unidades monoméricas de glucosa, interconectadas a través de enlaces químicos, forman estas macromoléculas. Por lo tanto, tienen un alto peso molecular.
Aunque tanto el almidón como la celulosa son formas poliméricas de glucosa, difieren en sus propiedades químicas y físicas. Estas diferencias se atribuyen principalmente a la diferencia en los vínculos. La celulosa tiene enlaces beta 1,4 entre las moléculas de glucosa, mientras que el almidón tiene enlaces 1,4 alfa entre las moléculas de glucosa. Esta es la diferencia clave entre la celulosa y el almidón. Además, la diferencia funcional entre la celulosa y el almidón es que la celulosa es un polisacárido estructural rígido, mientras que el almidón es un polisacárido de almacenamiento.
Aunque el almidón y la celulosa son formas poliméricas de glucosa, difieren en sus propiedades. Estas diferencias tienden a ser el resultado de la diferencia de un solo enlace químico entre las unidades monoméricas. La naturaleza variada hace que los carbohidratos jueguen tanto la función de suministro de energía como los roles estructurales. Tanto la celulosa como el almidón satisfacen las demandas energéticas de los organismos. Sin embargo, la celulosa juega un papel estructural, mientras que el almidón juega un papel de almacenamiento.