La censura y la restricción son dos aspectos contra la libertad de expresión que se ejercen por la fuerza, ya sea por el gobierno o por una autoridad. Uno de los derechos humanos básicos es la libertad de expresión. En los países democráticos se respeta la libertad de expresión y se permite la disidencia, ya que todos tienen derecho a tener su propia opinión.
Existe cierta diferencia entre la censura y las restricciones, como se evidencia en muchos países del mundo. Las restricciones son más leves en su naturaleza y parecen ser similares a pedir cortésmente a alguien que no haga algo. La censura, por otro lado, es más severa en el sentido de que a las personas no se les permite participar en algunas actividades en particular, ya que el gobierno considera que estas actividades no son adecuadas.
Un ejemplo de censura es el consejo de censores que otorga certificados o calificaciones a una película en función de su contenido. Los miembros de dicho panel de censura ven la película y luego deciden si se debe permitir que todo el público vea la película o si debería haber alguna restricción de edad. Las restricciones son referidas en términos de vigilancia moral en cuanto a lo que deben usar las mujeres en particular, que es lo que se sigue en algunos países, particularmente en el mundo árabe.