La criptografía funciona como un activo cuando se trata de ocultar información, especialmente a través de un canal inseguro. Hoy en día, la mayoría de los mensajes se comunican a través de redes, como las interacciones bancarias y la comunicación por correo electrónico.
La criptografía convierte un texto simple a un mensaje de texto cifrado empleando técnicas de cifrado. El proceso de obtener un texto cifrado a partir de un texto simple se conoce como descifrado. Este arte de la criptografía es un arte antiguo y el primer uso documentado de este término por escrito se remonta al año 1900 a. C.
El criptoanálisis es la técnica que se asocia con el descifrado de un texto cifrado. Una persona no autorizada intenta descifrar el mensaje al espiar el canal buscando sus debilidades para romper su seguridad.
La criptografía y el criptoanálisis son dos procesos diferentes. En la criptografía, un mensaje está codificado para que sea ilegible para las personas que pueden hacer un mal uso de la información. Por otro lado, un intruso realiza el criptoanálisis para decodificar el mensaje.