El objetivo principal de una discusión grupal es tener una comprensión más clara del tema elegido. Por otro lado, se lleva a cabo un debate para verificar si un cierto punto de vista es más creíble que su opuesto.
A diferencia de los debates, las discusiones grupales son menos formales ya que no tienen reglas estrictas sobre la cobertura de temas, el tiempo, los turnos, el modo de hablar y otros.
Las posiciones contradictorias se expresan evidentemente al comienzo de un debate, mientras que no se necesitan dos opiniones opuestas para que comience una discusión de grupo.
En un debate, hay un ganador y un perdedor, aunque hay ocasiones en que los resultados pueden ser empate. En cuanto a las discusiones grupales, los participantes no compiten entre sí, por lo que no tienen que preocuparse por ganar puntos.
Los que debaten tienen una audiencia que escucha los pros y los contras de un problema. Los oyentes tienen un papel más pasivo, ya que no pueden participar en el argumento. Por otro lado, los comentaristas de grupo pueden o no tener una audiencia.