El etanol desnaturalizado es una forma de etanol que contiene una gran cantidad de aditivos y desnaturalizantes, lo que lo hace venenoso.
El etanol sin desnaturalizar es la forma pura de etanol que no contiene ni aditivos ni desnaturalizantes.
El etanol desnaturalizado tiene un olor desagradable, un sabor amargo y es venenoso, en cambio el etanol sin desnaturalizar tiene un olor alcohólico característico y un sabor dulce.