Las fuentes cualitativas y cuantitativas son dos tipos diferentes de datos que se utilizan en la investigación.
Las fuentes cualitativas son aquellas que proporcionan información descriptiva y no numérica sobre un tema. Por ejemplo, entrevistas, encuestas abiertas, observaciones no estandarizadas y diarios de campo son ejemplos de fuentes cualitativas. Estas fuentes son útiles para obtener una comprensión más profunda y detallada de un tema, pero no proporcionan datos numéricos que se puedan analizar estadísticamente.
Las fuentes cuantitativas, por otro lado, proporcionan datos numéricos que se pueden medir y analizar estadísticamente. Por ejemplo, encuestas cerradas, estudios de mercado, registros de ventas y estudios de laboratorio son ejemplos de fuentes cuantitativas. Estas fuentes son útiles para obtener una visión general de un tema, pero no proporcionan información detallada y descriptiva.
En resumen las fuentes cualitativas son utilizadas para comprender el por qué y cómo de las cosas, mientras que las cuantitativas para conocer cuánto, cuántas, cuándo y dónde de las cosas. Ambos tipos de fuentes son valiosos y complementarios en la investigación, y a menudo se utilizan juntos para obtener una comprensión completa de un tema.