En el funcionalismo, la sociedad se toma como una entidad que consta de diferentes subdivisiones, y cada una de las subdivisiones tiene su función específica. Por otro lado, según la teoría del conflicto, la sociedad se comprende a través de los conflictos sociales que surgen por la injusticia.
El funcionalismo ve a la sociedad como un sistema que contiene diferentes partes, mientras que la teoría del conflicto ve a la sociedad como una lucha entre diferentes clases debido a la discriminación y la injusticia. El funcionalismo se centra en la importancia de la cooperación. Por otro lado, la teoría del conflicto se concentra en la importancia de la competencia.
El pionero o fundador de la teoría del funcionalismo es Emile Durkheim, mientras que el pionero o fundador de la teoría del conflicto es Karl Marx. El funcionalismo ve a la sociedad como interdependiente, dependiendo de cada aspecto de la sociedad para funcionar sin problemas. Por el contrario, la teoría del conflicto no cree en la bondad innata de la sociedad, en cambio, considera a la sociedad como diferentes grupos que compiten entre sí por los recursos.
El funcionalismo describe los factores sociales y económicos como aspectos positivos de una sociedad en funcionamiento. Por otro lado, la teoría del conflicto designa las características sociales y económicas como los motivos de la mala conducta y la aberración.
El funcionalismo, que también se caracteriza como teoría estructural-funcional, etiqueta a la sociedad como una estructura con numerosos segmentos interconectados indicados para satisfacer las necesidades orgánicas y sociales de los individuos que residen en esa sociedad. Emile Durkheim sugirió esta teoría para explicar los cambios en la sociedad a lo largo del tiempo y su supervivencia.
La teoría del conflicto describe a la sociedad no como un todo, sino en forma de partes producidas como resultado de la distribución desigual de los recursos.
El funcionalismo ignora los cambios sociales, mientras que la teoría del conflicto no ignora los cambios sociales provocados por la discriminación de clases y la distribución desigual de los recursos.
El funcionalismo asume que todos están satisfechos trabajando en la sociedad, mientras que la teoría del conflicto cree que todos no están satisfechos con el desempeño de la sociedad.
El funcionalismo considera a la sociedad como un todo, mientras que la teoría del conflicto considera a la sociedad como partes.
En resumen, el funcionalismo establece que cada aspecto de la sociedad cumple su función y es vital para la supervivencia de la sociedad. Por el contrario, la teoría del conflicto establece que la sociedad está dividida en partes debido al conflicto de clases perpetuo y la distribución desigual de los recursos.