La hipoxia se produce cuando la saturación de oxígeno está por debajo del 90%, mientras que la isquemia ocurre cuando se interrumpe el suministro de sangre al tejido.
La hipoxia puede ser causada por insuficiencia respiratoria, otras afecciones médicas y por condiciones ambientales.
La isquemia es causada por cualquier cosa que bloquea el suministro de sangre, incluida la formación de coágulos, placas o vasos sanguíneos que entran en espasmos.
Durante la hipoxia, solo el oxígeno es limitado, pero en la isquemia, el oxígeno y todos los nutrientes transportados por la sangre son limitados.
El tratamiento de la hipoxia implica oxígeno suplementario o ventiladores mecánicos.
El tratamiento de la isquemia involucra medicamentos como los coágulos o la cirugía.
La hipoxia y la isquemia son condiciones médicas peligrosas que deben tratarse rápidamente para evitar complicaciones graves.