La principal diferencia entre el hueso y el cartílago es que el hueso es un tejido duro y rígido, mientras que el cartílago es un tejido suave, elástico y flexible. El cartílago está presente en los oídos, la nariz y las articulaciones del cuerpo.
En las articulaciones, el cartílago cubre los extremos de los huesos y actúa como un amortiguador para evitar que los huesos se rocen entre sí.
Sin hueso, nuestros cuerpos serían como gelatina. Los huesos también nos ayudan a evitar lesiones mecánicas o daños, le dan al cuerpo la capacidad de moverse y funcionar, además de actuar como una superficie para que los músculos y los tendones se adhieran.
Además, los huesos también actúan para proteger los órganos como el corazón, el cerebro, los pulmones y muchos más.