Diferencias entre kéfir y kombucha

Hay dos tipos de kéfir: kéfir a base de leche y a base de agua. El kéfir de agua contiene líquido no lácteo como el agua de coco que ha sido fermentado. El kéfir de leche está hecho de la leche de vacas, cabras, ovejas o camellos.

El kéfir se elabora combinando la leche con un cultivo vivo de granos de kéfir, un cultivo simbiótico de bacterias y levaduras. Se deja fermentar la leche durante 24 a 48 horas y se vierte a través de un tamiz para eliminar los granos de kéfir de la leche.

El kéfir de agua tiene un sabor más dulce que el kéfir de leche. Antes del consumo, el kéfir también puede ser aromatizado con frutas y edulcorantes.

El kéfir tiene una amplia gama de probióticos, es por eso que puede actuar como ayuda digestiva. También fortalece el sistema inmunológico.

Diferencias entre la kombucha y el kéfir

Kombucha es un té verde o negro, endulzado y fermentado. El proceso de fermentación consiste en agregar una combinación de bacterias beneficiosas y levadura al té endulzado. Luego, esta mezcla se deja reposar durante 7 a 21 días.

Kombucha es una bebida agria, efervescente, y tiene un sabor similar a la sidra de manzana espumosa. Como está hecho de té, es una rica fuente de cafeína. Los beneficios de la kombucha son: proporcionar vitaminas del complejo B, bacterias probióticas y ayudar a desintoxicar el hígado.