El kung fu involucra una amplia gama de artes marciales chinas. Son los ejercicios más dedicados y disciplinados, que se practican y siguen en todo el mundo. Su origen se remonta al siglo IV y se originó en el templo de Shaolin, China.

Kung Fu es una ciencia en sí misma, que entrena a un individuo para mover el cuerpo en movimientos y giros circulares continuos.

En Kung Fu, el objetivo es causar el mayor daño posible sin perder el equilibrio, por lo que los golpes son extremadamente rápidos y controlados. Sus acciones se crean a partir de los movimientos y estilos de los animales.

Tai Chi (también T’ai chi ch’uan / Taijiquan) es un arte marcial chino, generalmente se enfoca más en la meditación y la estabilidad. Fue influenciado por los monasterios taoístas y budistas. Hoy en día, es uno de los deportes más apreciados.

El tai chi se practica en ambos sentidos, tanto para la defensa como para mantener la salud. Trabaja para mejorar la fuerza muscular, la flexibilidad y la forma física. Los movimientos de tai chi enfatizan la importancia de la transferencia de peso, lo que ayuda a equilibrar y previene las caídas. Las acciones en el tai chi dependen completamente de la acción y movimiento del oponente.

El estudio completo del tai chi involucra principalmente tres aspectos:

• Salud.
• Meditación.
• Artes marciales.