La neurona es una unidad fundamental en el sistema neural de los humanos.

Las neuronas tienen la maquinaria metabólica característica de las células somáticas. Tienen un núcleo y todos los demás órganos que son necesarios para una vida celular normal.

Sin embargo, en algunos otros aspectos, las neuronas son distintas. Las neuronas muestran una gran diversidad en su morfología, lo que también significa una diversidad en el funcionamiento, porque en el sistema nervioso central la forma, la estructura y las funciones de los componentes están estrechamente relacionadas.

Las neuronas son distintas por sus propiedades bioeléctricas únicas. Sin embargo, en el organismo humano, algunas células somáticas tienen propiedades bioeléctricas similares, por ejemplo, células que son responsables de generar actividad eléctrica dentro de las células musculares.

La neuroglia, o células gliales, proporcionan una variedad de funciones para el tejido cerebral. Apoyan las funciones metabólicas y de señalización de las neuronas.

Ciertos tipos de neuroglia están especializados en la fabricación de mielina, que sirve como aislamiento alrededor de los axones, ayudando significativamente a la propagación de señales eléctricas a lo largo de los axones.

La neuroglia también contribuye a la organización y formación de una barrera entre la sangre y el cerebro.

La otra función de la neuroglia es la participación en la creación de una respuesta inflamatoria en los tejidos neurales lesionados. Sin embargo, otros tipos de neuroglia son responsables de la formación de tejido cicatricial que es una respuesta del cerebro en caso de que se dañe la médula espinal.

En términos de su función principal, las neuronas son las principales responsables del procesamiento de las señales neuronales. La neuroglia, por otro lado, apoya las funciones eléctricas y químicas de las neuronas, que a menudo implican procesos eléctricos y químicos simultáneos.

Las neuronas están rodeadas de fluidos extracelulares, mientras que la neuroglia ayuda a mantener el equilibrio iónico de estos fluidos, lo cual es crucial para la capacidad de las neuronas de generar y mantener la señalización eléctrica.