El refuerzo negativo ocurre cuando un comportamiento se modifica mediante la eliminación de un evento aversivo o la prevención de estímulos desagradables. El objetivo en el refuerzo negativo es aumentar la aparición de un comportamiento con la ayuda de un reforzador negativo. Por lo tanto, se aprende y retiene un comportamiento para evitar o eliminar el estímulo negativo. El castigo físico y verbal puede aplicarse en el refuerzo negativo.

En psicología del comportamiento, el castigo ocurre cuando una consecuencia se impone inmediatamente a una persona o grupo en respuesta a un comportamiento indeseable. El castigo está destinado a suprimir este comportamiento o acción indeseable. Una idea errónea común sobre el castigo es que siempre se asocia con una consecuencia aversiva, que no siempre es el caso. Similar al refuerzo, un estímulo puede eliminarse o agregarse para disminuir las posibilidades de que el comportamiento objetivo vuelva a ocurrir.